Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

2 Crónicas 29:26-36 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

26. Los levitas estaban de pie con los instrumentos musicales de David, y los sacerdotes, con las trompetas.

27. Entonces Ezequías ordenó ofrecer el holocausto sobre el altar y, en el momento en que comenzaba el holocausto, comenzó también el canto en honor del Señor y el toque de trompetas, acompañados por los instrumentos musicales de David, rey de Israel.

28. Toda la asamblea permaneció postrada hasta que terminó el holocausto, mientras sonaban los cantos y tocaban las trompetas.

29. Terminado el holocausto, el rey y todos los presentes se arrodillaron en actitud de adoración.

30. El rey Ezequías y las autoridades ordenaron a los levitas que alabaran al Señor con salmos de David y del vidente Asaf. Los levitas cantaron con gran entusiasmo y se inclinaron en actitud de adoración.

31. Luego Ezequías tomó la palabra y dijo:— Ahora que han quedado consagrados al Señor, acérquense a traer al Templo sacrificios y ofrendas de acción de gracias.Entonces la comunidad llevó sacrificios y ofrendas de acción de gracias y los más generosos también llevaron holocaustos.

32. El número de víctimas que la comunidad ofreció al Señor en holocausto fue de setenta toros, cien carneros y doscientos corderos.

33. En total se ofrecieron seiscientos toros y tres mil corderos.

34. Como los sacerdotes resultaban insuficientes para desollar todas las víctimas, sus hermanos levitas los ayudaron a terminar la tarea, hasta que los sacerdotes se purificaron, pues los levitas se mostraron más predispuestos a purificarse que los sacerdotes.

35. Además de la gran cantidad de holocaustos, se ofreció también la grasa de los sacrificios de comunión y las libaciones de los holocaustos. De esta manera quedó restablecido el culto del Templo del Señor.

36. Ezequías y toda la gente se alegraron de que Dios hubiera animado al pueblo, pues todo se había hecho con rapidez.

Leer capítulo completo 2 Crónicas 29