21. Si algunos malvados huyen de su patria judía y van a refugiarse entre ustedes, entrégueselos al sumo sacerdote Simón, para que los castigue de acuerdo con su ley”.
22. Cartas iguales fueron enviadas al rey Demetrio*, a Atalo*, a Ariarates*, a Arsaces
23. y a todos estos países: Sampsame, Esparta, Delos, Mindos, Sición, Caria, Samos, Panfilia, Licia, Halicarnaso, Rodas, Fasélida, Cos, Side, Arados, Górtina, Cnido, Chipre y Cirene.
24. Igualmente, al sumo sacerdote Simón le fue enviada una copia de esta carta.
25. El rey Antíoco, manteniendo el sitio de Dor, acampó en un suburbio de la ciudad y no cesó de atacarla con sus tropas y máquinas de guerra. Tenía cercado a Trifón de manera que nadie podía entrar ni salir.
26. Simón envió en apoyo de Antíoco a dos mil soldados escogidos, y también plata, oro y gran cantidad de armamento.