Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

1 Macabeos 10:70-84 La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional (BHTI)

70. — Tú eres el único que se ha rebelado contra nosotros, y por tu culpa se me hace objeto de burla y desprecio. ¿Por qué ejerces tu autoridad contra nosotros en las montañas?

71. Puesto que tanto confías en tus tropas, baja a la llanura y midamos nuestras fuerzas, porque es a mí a quien apoyan las ciudades.

72. Pregunta y te dirán quién soy yo y quiénes son los demás que nos ayudan. También te dirán que frente a nosotros ustedes no podrán resistir, pues también tus antecesores fueron derrotados dos veces en su propia tierra.

73. Así pues, no podrás oponerte a la caballería ni a un ejército como el mío, pues en la llanura no hay piedras ni peñascos ni un lugar donde refugiarse.

74. Al escuchar el mensaje de Apolonio, se alteró el ánimo de Jonatán. Entonces escogió a diez mil hombres y salió de Jerusalén; su hermano Simón fue a su encuentro para prestarle ayuda.

75. Acampó cerca de Jope, pero los que vivían en aquella ciudad le cerraron las puertas, porque allí había un destacamento de Apolonio. Pero en cuanto se inició el ataque,

76. los habitantes, aterrorizados, abrieron las puertas de la ciudad y Jonatán se apoderó de Jope.

77. Cuando Apolonio conoció la situación, movilizó tres mil jinetes y una numerosa infantería, partiendo en dirección a Azoto, como si fuera de paso; pero al mismo tiempo iba penetrando en la llanura, confiado en el grueso de su caballería.

78. Jonatán lo fue siguiendo hasta Azoto, y allí entraron en combate.

79. Apolonio había dejado en retaguardia a mil jinetes emboscados;

80. pero Jonatán se dio cuenta de que estaban ocultos a espaldas suyas. Los enemigos rodearon su ejército, sin dejar de disparar flechas desde la mañana hasta la tarde.

81. Pero la gente de Jonatán se mantuvo firme, como él había ordenado, hasta que los caballos del enemigo se cansaron.

82. En aquel momento hizo Simón que sus tropas avanzaran y atacaran a la infantería enemiga, porque la caballería estaba ya extenuada. De ese modo los derrotó y los obligó a huir.

83. Toda la caballería se dispersó por la llanura, y los fugitivos llegaron a Azoto refugiándose, para salvarse, en el templo de su ídolo Dagón.

84. Jonatán incendió y saqueó Azoto y las aldeas vecinas. Incendió también el templo de Dagón, con todos los que se habían refugiado en él.

Leer capítulo completo 1 Macabeos 10