28. Pero yo os digo que todo el que mire a una mujer para codiciarla ya cometió adulterio con ella en su corazón.
29. Y si tu ojo derecho te es ocasión de pecar, arráncalo y échalo de ti; porque te es mejor que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno.
30. Y si tu mano derecha te es ocasión de pecar, córtala y échala de ti; porque te es mejor que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo vaya al infierno.
31. También se dijo: "Cualquiera que repudie a su mujer, que le de carta de divorcio."
32. Pero yo os digo que todo el que se divorcia de su mujer, a no ser por causa de infidelidad, la hace cometer adulterio; y cualquiera que se casa con una mujer divorciada, comete adulterio.
33. También habéis oído que se dijo a los antepasados: "No juraras falsamente, sino que cumpliras tus juramentosal Señor."
34. Pero yo os digo: no juréis de ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios;
35. ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey.
36. Ni jurarás por tu cabeza, porque no puedes hacer blanco o negro ni un solo cabello.
37. Antes bien, sea vuestro hablar: "Sí, sí" o "No, no"; y lo que es más de esto, procede del mal.