3. De modo que haced y observad todo lo que os digan; pero no hagáis conforme a sus obras, porque ellos dicen y no hacen.
4. Atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre las espaldas de los hombres, pero ellos ni con un dedo quieren moverlas.
5. Sino que hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres; pues ensanchan sus filacterias y alargan los flecos de sus mantos ;
6. aman el lugar de honor en los banquetes y los primeros asientos en las sinagogas,
7. y los saludos respetuosos en las plazas y ser llamados por los hombres Rabí.
8. Pero vosotros no dejéisque os llamen Rabí; porque uno es vuestro Maestro y todos vosotros sois hermanos.
9. Y no llaméis a nadie padre vuestro en la tierra, porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos.
10. Ni dejéis que os llamen preceptores; porque uno es vuestro Preceptor, Cristo.