9. El es quien nos guarda con vida, y no permite que nuestros pies resbalen.
10. Porque tú nos has probado, oh Dios; nos has refinado como se refina la plata.
11. Nos metiste en la red; carga pesada pusiste sobre nuestros lomos.
12. Hiciste cabalgar hombres sobre nuestras cabezas; pasamos por el fuego y por el agua, pero tú nos sacaste a un lugar de abundancia.
13. Entraré en tu casa con holocaustos; a ti cumpliré mis votos,
14. los que pronunciaron mis labios y habló mi boca cuando yo estaba en angustia.
15. Te ofreceré holocaustos de animales engordados, con sahumerio de carneros; haré una ofrenda de toros y machos cabríos. (Selah)