16. Porque perros me han rodeado; me ha cercado cuadrilla de malhechores; me horadaron las manos y los pies.
17. Puedo contar todos mis huesos. Ellos me miran, me observan;
18. reparten mis vestidos entre sí, y sobre mi ropa echan suertes.
19. Pero tú, oh Señor, no estés lejos; fuerza mía, apresúrate a socorrerme.