31. Me apego a tus testimonios; Señor, no me avergüences.
32. Por el camino de tus mandamientos correré, porque tú ensancharás mi corazón.
33. Enséñame, oh Señor, el camino de tus estatutos, y lo guardaré hasta el fin.
34. Dame entendimiento para que guarde tu ley y la cumpla de todo corazón.
35. Hazme andar por la senda de tus mandamientos, porque en ella me deleito.
36. Inclina mi corazón a tus testimonios y no a la ganancia deshonesta.
37. Aparta mis ojos de mirar la vanidad, y vivifícame en tus caminos.
38. Confirma a tu siervo tu palabra, que inspira reverencia por ti.
39. Quita de mí el oprobio que me causa temor, porque tus juicios son buenos.
40. He aquí, anhelo tus preceptos; vivifícame por tu justicia.
41. Venga también a mí tu misericordia, oh Señor, tu salvación, conforme a tu palabra.
42. Y tendré respuesta para el que me afrenta, pues confío en tu palabra.
43. No quites jamás de mi boca la palabra de verdad, porque yo espero en tus ordenanzas.
44. Y guardaré continuamente tu ley, para siempre y eternamente.
45. Y andaré en libertad, porque busco tus preceptos.
46. Hablaré también de tus testimonios delante de reyes, y no me avergonzaré.
47. Y me deleitaré en tus mandamientos, los cuales amo.