Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Isaías 57:1-12 La Biblia De Las Americas (LBLA)

1. El justo perece, y no hay quien se preocupe; los hombres piadosos son arrebatados, sin que nadie comprenda que ante el mal es arrebatado el justo,

2. y entra en la paz. Descansan en sus lechos, los que andan en su camino recto.

3. Mas vosotros venid acá, hijos de hechicera, descendientes de adúltero y ramera.

4. ¿De quién os burláis? ¿Contra quién abrís la boca y sacáis la lengua? ¿No sois vosotros hijos de rebeldía, descendientes de la mentira;

5. que ardéis con pasión entre los robles, bajo todo árbol frondoso; que sacrificáis los hijos en las quebradas, debajo de las hendiduras de las peñas?

6. Entre las piedras lisas de la quebrada está tu parte; ellas, ellas son tu suerte; también para ellas has derramado libación, has ofrecido ofrenda de cereal. ¿He de aplacarme con estas cosas?

7. Sobre un monte alto y encumbrado has puesto tu cama; allí también subiste a ofrecer sacrificio.

8. Y detrás de la puerta y del umbral has puesto tu señal. En verdad, bien lejos de mí te has descubierto, y has subido y ensanchado tu cama; de ellos has logrado pacto a tu favor, has amado su cama, has contemplado su virilidad.

9. Has ido al rey con ungüento, y has multiplicado tus perfumes; has enviado tus emisarios a gran distancia, y los has hecho descender al Seol.

10. Te cansaste por lo largo de tu camino, pero no dijiste: "No hay esperanza." Hallaste nuevas fuerzas, por eso no desfalleciste.

11. ¿Y de quién te asustaste y tuviste miedo, cuando mentiste y no te acordaste de mí, ni pensaste en ello? ¿No es acaso porque he guardado silencio por mucho tiempo que no me temes?

12. Yo declararé tu justicia y tus hechos, pero de nada te aprovecharán.

Leer capítulo completo Isaías 57