5. "Conforme a la promesa que os hice cuando salisteis de Egipto, mi Espíritu permanece en medio de vosotros; no temáis."
6. Porque así dice el Señor de los ejércitos: "Una vez más, dentro de poco, yo haré temblar los cielos y la tierra, el mar y la tierra firme.
7. "Y haré temblar a todas las naciones; vendrán entonces los tesoros de todas las naciones, y yo llenaré de gloria esta casa"--dice el Señor de los ejércitos.
8. "Mía es la plata y mío es el oro"--declara el Señor de los ejércitos.
9. "La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera"--dice el Señor de los ejércitos-- "y en este lugar daré paz"--declara el Señor de los ejércitos.
10. El día veinticuatro del mes noveno, en el año segundo de Darío, vino la palabra del Señor al profeta Hageo, diciendo:
11. Así dice el Señor de los ejércitos: "Pide ahora instrucción a los sacerdotes:
12. 'Si alguno lleva carne consagrada en la falda de su vestidura, y toca con su falda pan, alimento cocido, vino, aceite o cualquier otro alimento, ¿quedará éste consagrado?'" Y los sacerdotes respondieron, y dijeron: No.
13. Y dijo Hageo: Si alguno, inmundo por el contacto con un cadáver, toca cualquiera de estas cosas, ¿quedará inmunda? Respondieron los sacerdotes, y dijeron: Quedará inmunda.
14. Entonces volvió a hablar Hageo y dijo: "Así es este pueblo y así es esta nación delante de mí"--declara el Señor-- "y así es toda obra de sus manos; y lo que aquí ofrecen, inmundo es.
15. "Ahora pues, considerad bien esto de hoy en adelante: antes que se pusiera piedra sobre piedra en el templo del Señor,
16. desde aquel tiempo, venía alguno a un montón de veinte medidas, y había sólo diez; venía alguno al lagar para sacar cincuenta cántaros, y había sólo veinte.
17. "Os herí con viento abrasador, con añublo y con granizo en toda obra de vuestras manos; pero ninguno de vosotros se volvió a mí"--declara el Señor.
18. "Pero considerad bien esto desde hoy en adelante, desde el día veinticuatro del mes noveno; desde el día en que se pusieron los cimientos del templo del Señor, considerad bien:
19. "¿Está todavía la semilla en el granero? Todavía la vid, la higuera, el granado y el olivo no han dado fruto; pero desde hoy yo os bendeciré."
20. Y la palabra del Señor vino por segunda vez a Hageo, el día veinticuatro del mes, diciendo:
21. Habla a Zorobabel, gobernador de Judá, diciendo: "Yo estremeceré los cielos y la tierra,
22. y volcaré el trono de los reinos y destruiré el poder de los reinos de las naciones; y volcaré el carro y a los que montan en él, y caerán los caballos y sus jinetes, cada uno por la espada de su hermano.