23. Jesús los llamó, y les puso un ejemplo, diciendo: «¿Cómo puede Satanás expulsar al propio Satanás?
24. Un país dividido en bandos enemigos, no puede mantenerse;
25. y una familia dividida, no puede mantenerse.
26. Así también, si Satanás se divide y se levanta contra sí mismo, no podrá mantenerse; habrá llegado su fin.