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San Lucas 8:25-34 Dios Habla Hoy (DHH)

25. Después dijo a los discípulos:—¿Qué pasó con su fe?Pero ellos, asustados y admirados, se preguntaban unos a otros:—¿Quién será éste, que da órdenes al viento y al agua, y lo obedecen?

26. Por fin llegaron a la tierra de Gerasa, que está al otro lado del lago, frente a Galilea.

27. Al bajar Jesús a tierra, salió del pueblo un hombre que estaba endemoniado, y se le acercó. Hacía mucho tiempo que no se ponía ropa ni vivía en una casa, sino entre las tumbas.

28. Cuando vio a Jesús, cayó de rodillas delante de él, gritando:—¡No te metas conmigo, Jesús, Hijo del Dios altísimo! ¡Te ruego que no me atormentes!

29. Dijo esto porque Jesús había ordenado al espíritu impuro que saliera de él. Muchas veces el demonio se había apoderado de él; y aunque la gente le sujetaba las manos y los pies con cadenas para tenerlo seguro, él las rompía y el demonio lo hacía huir a lugares desiertos.

30. Jesús le preguntó:—¿Cómo te llamas?Y él contestó:—Me llamo Legión.Dijo esto porque eran muchos los demonios que habían entrado en él,

31. los cuales pidieron a Jesús que no los mandara al abismo.

32. Como había muchos cerdos comiendo en el cerro, los espíritus le rogaron que los dejara entrar en ellos; y Jesús les dio permiso.

33. Los demonios salieron entonces del hombre y entraron en los cerdos, y éstos echaron a correr pendiente abajo hasta el lago, y allí se ahogaron.

34. Los que cuidaban de los cerdos, cuando vieron lo sucedido, salieron huyendo y fueron a contarlo en el pueblo y por el campo.

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