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Hechos 10:14-29 Dios Habla Hoy (DHH)

14. Pedro contestó: «No, Señor; yo nunca he comido nada profano ni impuro.»

15. La voz le habló de nuevo, y le dijo: «Lo que Dios ha purificado, no lo llames tú profano.»

16. Esto sucedió tres veces, y luego la sábana volvió a subir al cielo.

17. Pedro estaba preocupado pensando qué querría decir aquella visión, cuando llegaron a la puerta los hombres de Cornelio, que habían averiguado dónde estaba la casa de Simón.

18. Al llegar, preguntaron en voz alta si allí se alojaba un tal Simón, a quien también llamaban Pedro.

19. Y mientras Pedro todavía estaba pensando en la visión, el Espíritu Santo le dijo: «Mira, tres hombres te buscan.

20. Levántate, baja y ve con ellos sin dudarlo, porque yo los he enviado.»

21. Pedro bajó y dijo a los hombres:—Yo soy el que ustedes buscan; ¿a qué han venido?

22. Ellos contestaron:—Venimos de parte del capitán Cornelio, un hombre justo, que adora a Dios y a quien todos los judíos estiman y quieren. Un ángel de Dios le dijo que lo llamara a usted, para que usted vaya a su casa y él escuche lo que tenga que decirle.

23. Entonces Pedro los hizo entrar, y se quedaron con él aquella noche. Al día siguiente, Pedro se fue con ellos, y lo acompañaron algunos de los hermanos que vivían en Jope.

24. Y al otro día llegaron a Cesarea, donde Cornelio los estaba esperando junto con un grupo de sus parientes y amigos íntimos, a quienes había invitado.

25. Cuando Pedro llegó a la casa, Cornelio salió a recibirlo, y se puso de rodillas delante de él, para adorarlo.

26. Pero Pedro lo levantó, diciéndole:—Ponte de pie, pues yo también soy un hombre, como tú.

27. Mientras hablaba con él, entró y encontró a muchas personas reunidas.

28. Pedro les dijo:—Ustedes saben que a un judío le prohíbe su religión tener tratos con extranjeros o entrar en sus casas. Pero Dios me ha enseñado que no debo llamar profano o impuro a nadie.

29. Por eso, tan pronto como me avisaron, vine sin poner ninguna objeción. Quisiera saber, pues, por qué me han llamado.

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