11. Por eso, Dios deja que el error los engañe y que crean en la mentira,
12. a fin de que sean condenados todos los que no han querido creer en la verdad, sino que se complacen en la maldad.
13. Pero nosotros siempre tenemos que dar gracias a Dios por ustedes, hermanos amados por el Señor, porque Dios los escogió para que fueran los primeros en alcanzar la salvación por medio del Espíritu que los hace santos y de la verdad en que han creído.
14. Para esto los llamó Dios por medio del evangelio que nosotros anunciamos: para que lleguen a tener parte en la gloria de nuestro Señor Jesucristo.
15. Así que, hermanos, sigan firmes y no se olviden de las tradiciones que les hemos enseñado personalmente y por carta.
16. Que nuestro Señor Jesucristo mismo, y Dios nuestro Padre, que nos ha amado y nos ha dado consuelo eterno y esperanza gracias a su bondad,
17. anime sus corazones y los mantenga a ustedes constantes en hacer y decir siempre lo bueno.