Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Levítico 13:26-36 Dios Habla Hoy (DHH)

26. Si al examinar el sacerdote la mancha, ve que no hay en ella ningún pelo blanco ni aparece más hundida que la piel, sino que va desapareciendo, entonces encerrará a esa persona durante siete días.

27. A los siete días el sacerdote la examinará, y si la mancha se ha extendido por la piel, entonces declarará impura a esa persona, pues tiene llaga de lepra.

28. Pero si la mancha se mantiene sin extenderse por la piel y va desapareciendo, entonces no es más que la hinchazón de la quemadura, así que el sacerdote declarará puro al enfermo, porque sólo se trata de la cicatriz de la quemadura.

29. »Cuando un hombre o una mujer tenga una llaga en la cabeza o en la barba,

30. el sacerdote examinará la llaga. Si la llaga aparece más hundida que la piel y tiene pelo amarillento y escaso, entonces el sacerdote declarará impura a esa persona, pues tiene tiña, es decir, lepra de la cabeza y de la barba.

31. Y si al examinar el sacerdote la llaga tiñosa ve que no está más hundida que la piel ni tiene pelo negro, entonces encerrará a esa persona durante siete días.

32. Al séptimo día el sacerdote examinará la llaga, y si la tiña no se ha extendido, ni aparece más hundida que la piel, ni tiene pelo amarillento,

33. entonces ordenará el sacerdote que la persona enferma se afeite, excepto en la llaga tiñosa, y lo encerrará por siete días más.

34. Pasados los siete días el sacerdote volverá a examinar la llaga, y si la tiña no se ha extendido ni aparece más hundida que la piel, entonces el sacerdote declarará pura a la persona enferma, la cual lavará sus ropas y quedará pura.

35. Pero en caso de que la tiña siga extendiéndose por la piel después de haber sido declarada pura,

36. el sacerdote deberá examinar otra vez a la persona enferma; si la tiña se ha extendido por la piel, no hará falta que busque el pelo amarillo: esa persona es impura.

Leer capítulo completo Levítico 13