7. Si hicieras lo bueno, podrías levantar la cara; pero como no lo haces, el pecado está esperando el momento de dominarte. Sin embargo, tú puedes dominarlo a él.»
8. Un día, Caín invitó a su hermano Abel a dar un paseo, y cuando los dos estaban ya en el campo, Caín atacó a su hermano Abel y lo mató.
9. Entonces el Señor le preguntó a Caín:—¿Dónde está tu hermano Abel?Y Caín contestó:—No lo sé. ¿Acaso es mi obligación cuidar de él?
10. El Señor le dijo:—¿Por qué has hecho esto? La sangre de tu hermano, que has derramado en la tierra, me pide a gritos que yo haga justicia.
11. Por eso, quedarás maldito y expulsado de la tierra que se ha bebido la sangre de tu hermano, a quien tú mataste.
12. Aunque trabajes la tierra, no volverá a darte sus frutos. Andarás vagando por el mundo, sin poder descansar jamás.
13. Entonces Caín respondió al Señor:—Yo no puedo soportar un castigo tan grande.
14. Hoy me has echado fuera de esta tierra, y tendré que vagar por el mundo lejos de tu presencia, sin poder descansar jamás. Y así, cualquiera que me encuentre me matará.
15. Pero el Señor le contestó:—Pues si alguien te mata, será castigado siete veces.Entonces el Señor le puso una señal a Caín, para que el que lo encontrara no lo matara.
16. Caín se fue del lugar donde había estado hablando con el Señor, y se quedó a vivir en la región de Nod, que está al oriente de Edén.
17. Caín se unió con su mujer, y ella quedó embarazada y dio a luz a Henoc. Luego Caín fundó una ciudad, a la que le puso por nombre Henoc, como a su hijo.