Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Ezequiel 16:16-32 Dios Habla Hoy (DHH)

16. Con tus vestidos hiciste tiendas de culto pagano en las colinas, y te prostituiste en ellas.

17. Tomaste las joyas de oro y de plata que yo te había regalado, e hiciste figuras de hombres para prostituirte con ellos;

18. les pusiste tus vestidos de bellos colores y les ofreciste mi aceite y mi incienso.

19. El pan que yo te había dado, que era de la mejor harina, y el aceite y la miel con que yo te había alimentado, se los ofreciste a ellos como ofrenda de olor agradable. Yo, el Señor, lo afirmo.

20. »”Tomaste también a los hijos e hijas que tuve contigo, y los sacrificaste a esos ídolos como alimento para ellos. ¿Te parecía poco haberte convertido en prostituta,

21. que además sacrificaste a mis hijos entregándolos a morir quemados en honor de esos ídolos?

22. Con tu detestable vida de prostituta ya no te acuerdas de cuando eras niña y estabas completamente desnuda, pataleando en tu propia sangre.

23. »”Esto afirmo yo, el Señor: ¡Ay de ti! Además de todos los males que hiciste,

24. te construiste en todo sitio despejado un lugar donde dar culto a los ídolos y entregarte a la prostitución.

25. Al término de todo camino construiste tales lugares, y convertiste tu belleza en algo detestable ofreciendo tu cuerpo a todo el que pasaba, en continuos actos de prostitución.

26. Practicaste la prostitución con tus vecinos, esos egipcios de gran potencia sexual, y provocaste mi ira con tus continuos actos de prostitución.

27. »”Entonces levanté la mano para castigarte: te hice pasar privaciones y te entregué a las ciudades filisteas, que te odian y que estaban disgustadas por tu conducta vergonzosa.

28. Pero no contenta con eso, te entregaste a la prostitución con los asirios; y ni aun así quedaste satisfecha.

29. Y seguiste entregándote a la prostitución en Babilonia, tierra de comerciantes; y ni aun así quedaste satisfecha.

30. Yo, el Señor, afirmo: ¡Qué enfermo tenías el corazón para cometer todos esos actos propios de una prostituta desvergonzada!

31. Al término de todo camino y en todo sitio despejado, te construiste un altar donde dar culto a los ídolos y entregarte a la prostitución. Pero tú no te portabas como las prostitutas: ¡tú no cobrabas!

32. »”La mujer que es infiel a su marido, recibe a extraños.

Leer capítulo completo Ezequiel 16