14. Pero ellos no hicieron caso, sino que fueron tan tercos como sus antepasados, los cuales no confiaron en el Señor su Dios;
15. despreciaron sus leyes, y la alianza que había hecho con sus antepasados, y los mandatos que les había dado. Además siguieron a dioses sin ningún valor, con lo que también ellos perdieron su valor, e imitaron a las naciones que había a su alrededor, cosa que les había prohibido el Señor.
16. Dejaron todos los mandamientos del Señor su Dios, y se hicieron dos becerros de bronce fundido y una representación de Aserá, y además adoraron a todos los astros del cielo y a Baal.
17. También hicieron quemar a sus hijos e hijas, practicaron la adivinación y los augurios, y se entregaron a hacer lo malo a los ojos del Señor, provocando así su ira.
18. Por lo tanto, el Señor se enfureció contra Israel y lo arrojó de su presencia, y no dejó más que a la tribu de Judá.
19. Pero tampoco Judá cumplió los mandamientos del Señor su Dios, sino que siguió las prácticas que los de Israel habían establecido.
20. Entonces el Señor rechazó a todos los descendientes de los israelitas y los humilló, entregándolos en manos de salteadores hasta arrojarlos de su presencia.
21. Separó de la dinastía de David a Israel, y los de Israel hicieron rey a Jeroboam, hijo de Nabat, quien hizo que los israelitas se apartaran del Señor y pecaran gravemente.
22. Así los de Israel cometieron los mismos pecados que había cometido Jeroboam, y no los abandonaron.
23. Finalmente el Señor apartó de su presencia a Israel, como lo había anunciado por medio de todos los profetas, sus siervos, y así los de Israel fueron llevados cautivos a Asiria, donde están hasta el día de hoy.