28. Fue el soldado a la cárcel, le cortó la cabeza a Juan y la puso en una bandeja. Se la dio a la muchacha y ella se la entregó a su madre.
29. Cuando los seguidores de Juan lo supieron, tomaron el cuerpo y lo pusieron en una tumba.
30. Después de esto, los apóstoles se reunieron con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado.
31. Jesús les dijo:–Venid, vosotros solos, a descansar un poco a un lugar apartado.Porque iba y venía tanta gente que ellos ni siquiera tenían tiempo para comer.
32. Así que Jesús y sus apóstoles se fueron en una barca a un lugar apartado.
33. Pero muchos los vieron ir y los reconocieron; entonces, de todos los pueblos, corrieron allá y se les adelantaron.
34. Al bajar Jesús de la barca vio la multitud, y sintió compasión de ellos porque estaban como ovejas que no tienen pastor; y comenzó a enseñarles muchas cosas.
35. Por la tarde, sus discípulos se le acercaron y le dijeron:–Ya es tarde, y este es un lugar solitario.