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Lucas 9:26-41 Dios Habla Hoy con Deuterocanónicos Versión Española (DHHED)

26. Pues si alguno se avergüenza de mí y de mi mensaje, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga con su gloria y con la gloria de su Padre y de los santos ángeles.

27. Os aseguro que algunos de los que están aquí no morirán sin haber visto el reino de Dios.

28. Unos ocho días después de esta conversación, Jesús subió a un monte a orar, acompañado de Pedro, Santiago y Juan.

29. Mientras oraba, cambió el aspecto de su rostro y sus ropas se volvieron muy blancas y brillantes.

30. Y aparecieron dos hombres conversando con él: eran Moisés y Elías,

31. que estaban rodeados de un resplandor glorioso y hablaban de la partida de Jesús de este mundo, que iba a tener lugar en Jerusalén.

32. Aunque Pedro y sus compañeros tenían mucho sueño, permanecieron despiertos y vieron la gloria de Jesús y a los dos hombres que estaban con él.

33. Cuando aquellos hombres se separaban ya de Jesús, Pedro le dijo:–Maestro, ¡qué bien que estemos aquí! Vamos a hacer tres chozas: una para ti, otra para Moisés y otra para Elías.Pero Pedro no sabía lo que decía.

34. Mientras hablaba, una nube los envolvió en sombra; y al verse dentro de la nube, tuvieron miedo.

35. Entonces de la nube salió una voz que dijo: “Este es mi Hijo, mi elegido. Escuchadle.”

36. Después que calló la voz, vieron que Jesús estaba solo. Ellos guardaron esto en secreto, y por entonces no contaron a nadie lo que habían visto.

37. Al día siguiente, cuando bajaron del monte, una gran multitud salió al encuentro de Jesús.

38. En esto, un hombre de en medio de la gente gritó con voz fuerte:–¡Maestro, por favor, mira a mi hijo, el único que tengo!

39. Un espíritu se apodera de él, y de repente le hace gritar, retorcerse violentamente y echar espuma por la boca. Lo está destrozando, porque apenas se separa de él.

40. He rogado a tus discípulos que expulsen ese espíritu, pero no han podido.

41. Jesús contestó:–¡Oh gente sin fe y perversa! ¿Hasta cuándo tendré que estar con vosotros y soportaros? Trae aquí a tu hijo.

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