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Hechos 24:16-27 Dios Habla Hoy con Deuterocanónicos Versión Española (DHHED)

16. Por eso procuro siempre tener limpia mi conciencia delante de Dios y de los hombres.

17. “Al cabo de varios años de ausencia volví a mi tierra para traer limosnas y presentar ofrendas.

18-19. Esto es lo que estaba haciendo, sin tumultos ni gente y después de haberme purificado según el rito establecido, cuando unos judíos de la provincia de Asia dieron conmigo en el templo. Ellos son quienes deberían venir y presentarse aquí para acusarme, si es que tienen algo contra mí.

20. Y si no, que estos que están aquí digan si me hallaron culpable de algún delito cuando me presenté ante la Junta Suprema de los judíos.

21. A no ser que, en presencia de ellos, dije en voz alta: ‘Hoy me estáis juzgando porque creo en la resurrección de los muertos.’ ”

22. Al oir esto, Félix, que se hallaba bien informado acerca del nuevo camino, dejó el asunto pendiente y les dijo:–Cuando venga el comandante Lisias me infomaré mejor de este asunto vuestro.

23. Ordenó Félix al centurión que Pablo siguiera detenido, pero que le dieran alguna libertad y dejasen que sus amigos le atendieran.

24. Unos días más tarde se presentó de nuevo Félix, junto con Drusila, su esposa, que era judía. Mandó Félix llamar a Pablo y escuchó lo que este decía acerca de la fe en Jesucristo.

25. Pero cuando Pablo le habló de una vida de rectitud, del dominio propio y del juicio futuro, Félix se asustó y le dijo:–Vete ahora. Volveré a llamarte cuando tenga tiempo.

26. Por otra parte, Félix esperaba recibir dinero de Pablo, para que le soltara, y por eso le llamaba muchas veces para hablar con él.

27. Después de dos años Félix dejó de ser gobernador, y en su lugar entró Porcio Festo. Y como Félix quería quedar bien con los judíos, dejó preso a Pablo.

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