17. no os hagáis daño unos a otros ni juréis en falso. Porque yo odio todo eso. Yo, el Señor, lo afirmo.”
18. El Señor todopoderoso se dirigió a mí y me dijo:
19. “Los ayunos de los meses cuarto, quinto, séptimo y décimo se convertirán en motivo de alegría, en fiestas felices para los descendientes de Judá. ¡Amad, pues, la verdad y la paz!”
20. Esto dice el Señor todopoderoso: “Todavía han de venir gentes y habitantes de grandes ciudades.
21. Entonces los de una ciudad se dirigirán a los de otra y les dirán: ‘¡Vamos a buscar al Señor todopoderoso y a pedirle que nos bendiga!’ Y los otros les contestarán: ‘¡Nosotros también iremos!’
22. Y vendrán a Jerusalén muchos pueblos y naciones numerosas, a buscar al Señor todopoderoso y a pedirle que los bendiga.
23. En aquel tiempo, diez extranjeros de las demás naciones agarrarán por la ropa a un judío y le dirán: ‘¡Queremos ir con vosotros, porque hemos oído que Dios está con vosotros!’ ”