Capítulos

  1. 1
  2. 2
  3. 3
  4. 4

Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Malaquías 1 Dios Habla Hoy con Deuterocanónicos Versión Española (DHHED)

I. INTRODUCCIÓN (1.1)

1. Este es el mensaje que el Señor comunicó al pueblo de Israel por medio del profeta Malaquías.

II. AMOR DEL SEÑOR A ISRAEL (1.2-5)

2. El Señor dice: “Yo os amo”, pero vosotros respondéis: “¿Cómo sabemos que nos amas?” El Señor contesta: “Yo os amo por la misma razón que, siendo hermanos Esaú y Jacob, amé a Jacob

3. y aborrecí a Esaú. Y el país de Esaú, que era montañoso, lo convertí en un desierto; y sus propiedades, en tierra solo buena para los animales salvajes.”

4. Si los edomitas, descendientes de Esaú, dijeran: “Hemos sido destruidos, pero reconstruiremos nuestra nación”, el Señor todopoderoso respondería: “Ellos reconstruirán, pero yo los destruiré otra vez. Su país será llamado ‘País de maldad’ y ‘Nación del eterno enojo del Señor’.”

5. Vosotros lo veréis con vuestros propios ojos, y diréis: “¡El Señor es tan grande que sobrepasa las fronteras de Israel!”

III. CONTRA LOS SACERDOTES QUE NO OFRECEN LOS SACRIFICIOS CORRECTAMENTE (1.6–2.9)

6. El Señor todopoderoso dice a los sacerdotes: “Los hijos honran a sus padres y los criados respetan a sus amos. Pues si yo soy vuestro Padre, ¿por qué no me honráis? Si soy vuestro Amo, ¿por qué no me respetáis? Vosotros me despreciáis, y todavía decís: ‘¿En qué te hemos despreciado?’

7. Traéis a mi altar pan indigno, y todavía preguntáis: ‘¿En qué te ofendemos?’ Vosotros me ofendéis cuando pensáis que mi altar puede ser despreciado

8. y que no hay nada malo en ofrecerme animales ciegos, cojos o enfermos.” ¡Id, pues, y llevádselos a vuestros gobernantes! ¡Ved si ellos os aceptan con gusto el regalo!

9. Ahora pues, pedidle a Dios que tenga compasión de vosotros. Pero si le hacéis esa clase de ofrendas, no esperéis que Dios os acepte con gusto. El Señor todopoderoso dice:

10. “¡Ojalá alguno de vosotros cerrara las puertas del templo, para que no volvierais a encender en vano el fuego de mi altar! Porque no estoy contento con vosotros ni voy a seguir aceptando vuestras ofrendas.

11. En todas las naciones del mundo se me honra; en todas partes queman incienso en mi honor y me hacen ofrendas dignas.

12. En cambio, vosotros me ofendéis, porque pensáis que mi altar, que es mi mesa, puede ser despreciado, y que es despreciable la comida que hay en él.

13. Decís: ‘¡Ya estamos cansados de todo esto!’, y me despreciáis. Y todavía suponéis que voy a alegrarme cuando venís a ofrecerme un animal robado o una res coja o enferma.

14. ¡Maldito sea el tramposo que me promete un animal sano de su rebaño y luego me sacrifica uno que tiene defecto! Yo soy el gran Rey, y soy temido entre las naciones.” Esto dice el Señor todopoderoso.