2. Aquella noche Dios habló a Israel en una visión, llamándole por su nombre, Jacob. Y él contestó:–Aquí estoy.
3. Entonces Dios dijo:–Yo soy Dios, el Dios de tu padre. No tengas miedo de ir a Egipto, porque allí haré de tus descendientes una gran nación.
4. Iré contigo a Egipto, y yo mismo sacaré de allí a tus descendientes. Además, cuando mueras, José estará a tu lado.
5. Después Jacob salió de Beerseba. Los hijos de Israel pusieron a su padre y a los hijos y mujeres de ellos en las carretas que el faraón había enviado para llevarlos.
6. Jacob y todos los suyos se fueron a Egipto, y se llevaron sus vacas y ovejas y todo lo que habían llegado a poseer en Canaán.
7. Todos sus hijos, hijas, nietos y nietas se fueron con él.