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Ezequiel 20:21-32 Dios Habla Hoy con Deuterocanónicos Versión Española (DHHED)

21. ‘Pero también los hijos de ellos se rebelaron contra mí. No obedecieron mis leyes, ni cumplieron ni practicaron mis mandamientos, que dan vida a quien los practica, y profanaron mis sábados. Pensé en descargar mi ira contra ellos y aniquilarlos allí, en el desierto, para calmar mi furor,

22. pero me contuve por honor a mi nombre, para no quedar mal a los ojos de las naciones que habían visto cómo los había sacado de Egipto.

23. En el desierto les juré que los iba a dispersar por todas las naciones del mundo,

24. porque no cumplieron mis mandamientos, rechazaron mis leyes, profanaron mis sábados y solo tuvieron ojos para los ídolos de sus padres.

25. Y hasta llegué a imponerles leyes que no eran buenas y mandamientos con los que no podían encontrar la vida.

26. Dejé que se contaminaran llevando ofrendas a los ídolos y sacrificándoles en el fuego a sus primogénitos. Esto lo hice para que se llenaran de miedo y reconocieran que yo soy el Señor.’

27. “Y tú, hombre, di a los israelitas: ‘Esto dice el Señor: También vuestros padres me han ofendido; me han sido infieles.

28. Cuando yo los hice entrar en la tierra que había jurado darles, apenas veían una colina elevada o un árbol frondoso, allí ofrecían sus sacrificios y hacían las ofrendas que tanto me ofenden, ponían sus sustancias perfumadas y derramaban sus ofrendas de vino.

29. Yo les pregunté: ¿Qué santuario pagano es ese a donde vais vosotros? Y se le quedó el nombre de Santuario Pagano hasta el día de hoy.’

30. “Dile al pueblo de Israel: ‘Esto dice el Señor: ¿Por qué queréis mancharos lo mismo que vuestros antepasados? ¿Por qué me sois infieles adorando a esos ídolos detestables?

31. Al presentar esas ofrendas y sacrificar en el fuego a vuestros hijos, seguís todavía manchándoos con vuestros ídolos. ¿Y así queréis, israelitas, venir a consultarme? Yo, el Señor, juro por mi vida que no me dejaré consultar por vosotros.

32. Se os ha metido en la cabeza ser como las demás naciones de la tierra, que adoran al palo y a la piedra; pero no será así.

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