Antiguo Testamento

Nuevo Testamento

Éxodo 5:2-15 Dios Habla Hoy con Deuterocanónicos Versión Española (DHHED)

2. Pero el faraón contestó:–¿Y quién es ‘el Señor’, para que yo le obedezca y deje ir a los israelitas? Ni conozco al Señor, ni tampoco voy a dejar ir a los israelitas.

3. Entonces ellos dijeron:–El Dios de los hebreos ha venido a nuestro encuentro; así que vamos a ir al desierto, a una distancia de tres días de camino, para ofrecer sacrificios al Señor nuestro Dios, no sea que nos haga morir con una peste o a filo de espada.

4. Pero el rey de Egipto les dijo:–Moisés y Aarón, ¿por qué distraéis a la gente de su trabajo? ¡Marchaos y seguid trabajando!

5. También les dijo el faraón:–Ahora que hay tantos israelitas en el país, ¿vais a hacer que dejen de trabajar?

6. Aquel mismo día el faraón ordenó a los capataces y jefes de grupo:

7. –Desde ahora ya no daréis paja a los israelitas para que hagan adobes, como se ha venido haciendo; ¡que vayan ellos mismos a recoger la paja!

8. Pero exigidles la misma cantidad de adobes que han hecho hasta ahora. ¡Ni un solo adobe menos! Son unos holgazanes, y por eso gritan: ‘¡Vayamos a ofrecer sacrificios a nuestro Dios!’

9. Haced trabajar más duro a esa gente; mantenedlos ocupados, para que no hagan caso de mentiras.

10. Los capataces y jefes de grupo salieron y fueron a decir a la gente:–El faraón ha ordenado que no se os siga dando paja.

11. Desde ahora vosotros mismos tendréis que recogerla donde la encontréis. Pero no por eso se os va a rebajar la cantidad de adobes que tenéis fijada.

12. Los israelitas se dispersaron por todo Egipto, en busca de rastrojo, para usarlo como paja.

13-14. Todos los días los capataces del faraón les exigían la misma cantidad de adobes que hacían cuando se les daba la paja, y además golpeaban a los jefes de grupo israelitas, y les decían:–¿Cómo es que ni ayer ni hoy habéis completado la misma cantidad de adobes que antes hacíais?

15. Los jefes de grupo israelitas fueron a quejarse al faraón, y le dijeron:–¿Por qué trata así Su Majestad a estos siervos suyos?

Leer capítulo completo Éxodo 5