1. Aquel mismo día regaló el rey Asuero a la reina Ester la casa de Amán, enemigo de los judíos, y Mardoqueo se presentó ante el rey, a quien ya Ester había dicho que Mardoqueo era su primo.
2. Entonces el rey se quitó el anillo que había recobrado de Amán, y se lo dio a Mardoqueo. Ester, por su parte, le nombró administrador de todos los bienes que habían sido de Amán.
3. Luego Ester habló nuevamente con el rey, y echándose a sus pies y con lágrimas en los ojos le suplicó que revocara la malvada orden de Amán y que no se llevaran a cabo sus planes contra los judíos.
4. El rey tendió hacia Ester su cetro de oro. Ella se levantó, y de pie ante él