27. El rey hizo que en Jerusalén hubiera tanta plata como piedras, y que abundara el cedro tanto como las higueras silvestres en la llanura.
28. Los caballos para Salomón eran llevados de Muzri y de Cilicia, pues los comerciantes de la corte los compraban allí.
29. Un carro importado de Egipto valía seiscientas monedas de plata, y un caballo, ciento cincuenta. Y todos los reyes hititas y sirios los compraban por medio de los agentes de Salomón.