29. Esta es la ley de los celos, cuando la mujer errare estando en poder de su marido, y se contaminare;
30. o del marido, sobre el cual pasare espíritu de celo, y tuviere celos de su mujer; la presentará entonces delante del SEÑOR, y el sacerdote ejecutará en ella toda esta ley.
31. Y aquel varón será libre de iniquidad, y la mujer llevará su iniquidad.