17. Y las puso Dios en el extendimiento de los cielos, para alumbrar sobre la tierra,
18. y para señorear en el día y en la noche, y para apartar la luz y las tinieblas; y vio Dios que era bueno.
19. Y fue la tarde y la mañana el día cuarto.
20. Y dijo Dios: Produzcan las aguas gran cantidad de criaturas de alma viviente, y aves que vuelen sobre la tierra, sobre la faz del extendimiento de los cielos.