26-29. No hay arma capaz de herirlo,pues rompe el hierro como paja,y el bronce como madera podrida;las flechas no lo penetran,y las piedras de las hondastan sólo le hacen cosquillas;golpearlo con un martilloes como golpearlo con una pluma.
30. Cuando se arrastra por el lodo,abre surcos como el arado;
31. cuando se lanza al fondo del lago,el agua parece una olla hirviendo,
32. y a su paso va dejandouna estela blanca y brillante.