62. ¿Pues qué será, si viereis al Hijo del hombre que sube donde estaba primero?
63. El Espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado, son Espíritu y son vida.
64. Mas hay algunos de vosotros que no creen. Porque Jesús desde el principio sabía quiénes eran los que no creían, y quién le había de entregar.
65. Y decía: Por eso os he dicho que ninguno puede venir a mí, si no le fuere dado de mi Padre.
66. Después de esto, muchos de sus discípulos volvieron atrás, y ya no andaban con él.
67. Dijo entonces Jesús a los doce: ¿Queréis vosotros iros también?
68. Y le respondió Simón Pedro: Señor, ¿A quién iremos? Tú tienes las palabras de vida eterna.