8. Dijeron en su corazón: Destruyámoslos de una vez; han quemado todas las sinagogas de Dios en la tierra.
9. No vemos ya nuestras señales; no hay más profeta; ni con nosotros hay quien sepa hasta cuándo.
10. ¿Hasta cuándo, oh Dios, el angustiador nos afrentará? ¿Ha de blasfemar el enemigo perpetuamente tu nombre?
11. ¿Por qué retraes tu mano, y tu diestra? ¿Por qué la escondes dentro de tu seno?
12. Pero Dios es mi Rey ya de antiguo; el que obra salvación en medio de la tierra.
13. Tú dividiste el mar con tu poder; quebrantaste cabezas de dragones en las aguas.
14. Tú machacaste las cabezas del leviatán; lo diste por comida al pueblo de los desiertos.
15. Tú abriste fuente y río; tú secaste ríos impetuosos.