1. Oh Dios, tú eres mi Dios; temprano te buscaré. Mi alma tiene sed de ti; mi carne te anhela en tierra seca y árida donde no hay agua,
2. para ver tu poder y tu gloria, así como te he mirado en el santuario.
3. Porque mejor es tu misericordia que la vida; mis labios te alabarán.
4. Así te bendeciré en mi vida; en tu nombre alzaré mis manos.
5. Como de médula y de grosura será saciada mi alma, y con labios de júbilo te alabará mi boca