8. Por tanto, lamentaré, y aullaré, y andaré despojado y desnudo; haré aullido como de chacales y lamento como de avestruces.
9. Porque su llaga es incurable, pues llegó hasta Judá; llegó hasta la puerta de mi pueblo, hasta Jerusalén.
10. No lo digáis en Gat ni tampoco lloréis; revuélcate en el polvo de Bet-le-afra.