42. Llamándolos junto a El, Jesús les dijo: "Ustedes saben que los que son reconocidos como gobernantes de los Gentiles se enseñorean de ellos, y que sus grandes ejercen autoridad sobre ellos.
43. Pero entre ustedes no es así, sino que cualquiera de ustedes que desee llegar a ser grande será su servidor,
44. y cualquiera de ustedes que desee ser el primero será siervo de todos.
45. Porque ni aun el Hijo del Hombre vino para ser servido, sino para servir, y para dar Su vida en rescate por muchos."
46. Entonces llegaron a Jericó. Y cuando El salía de Jericó con Sus discípulos y una gran multitud, un mendigo ciego llamado Bartimeo, el hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino.
47. Cuando oyó que era Jesús el Nazareno, comenzó a gritar y a decir: "¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!"
48. Y muchos lo reprendían para que se callara, pero él gritaba mucho más: "¡Hijo de David, ten misericordia de mí!"