11. Entonces El me dijo: "Hijo de hombre, estos huesos son toda la casa de Israel. Ellos dicen: 'Nuestros huesos se han secado, y nuestra esperanza ha perecido. Estamos completamente destruidos.'
12. Por tanto, profetiza, y diles: 'Así dice el Señor Dios: "Voy a abrir sus sepulcros y los haré subir de sus sepulcros, pueblo Mío, y los llevaré a la tierra de Israel.
13. Y sabrán que Yo soy el Señor, cuando abra sus sepulcros y los haga subir a ustedes de sus sepulcros, pueblo Mío.
14. Pondré Mi Espíritu en ustedes, y vivirán, y los estableceré en su tierra. Entonces sabrán que Yo, el Señor, he hablado y lo he hecho," declara el Señor.'"
15. Y vino a mí la palabra del Señor:
16. "Tú, hijo de hombre, toma una vara y escribe en ella: 'Para Judá y para los Israelitas, sus compañeros.' Toma luego otra vara y escribe en ella: 'Para José, la vara de Efraín, y para toda la casa de Israel, sus compañeros.'
17. Júntalas la una con la otra en una sola vara para que sean una sola en tu mano.
18. Y cuando los hijos de tu pueblo te pregunten: '¿No nos explicarás qué quieres decir con esto?'