11. Luego pon la olla vacía sobre las brasas, Para que se caliente, Se ponga al rojo su bronce, Se funda en ella su inmundicia, Y sea consumida su herrumbre.
12. De tanto trabajo Me ha fatigado la olla, Y no se le ha ido su mucha herrumbre. ¡Consúmase en el fuego su herrumbre!
13. En tu inmundicia hay lujuria. Por cuanto Yo quise limpiarte Pero no te dejaste limpiar, No volverás a ser purificada de tu inmundicia, Hasta que Yo haya saciado Mi furor sobre ti.
14. Yo, el Señor, he hablado. Esto viene y Yo actuaré; no Me volveré atrás, no Me apiadaré y no Me arrepentiré. Según tus caminos y según tus obras te juzgaré," declara el Señor Dios.'"
15. Y vino a mí la palabra del Señor:
16. "Hijo de hombre, voy a quitarte de golpe el encanto de tus ojos; pero no te lamentarás, ni llorarás, ni correrán tus lágrimas.
17. Gime en silencio, no hagas duelo por los muertos; átate el turbante, ponte el calzado en los pies y no te cubras los bigotes ni comas pan de duelo."
18. Hablé al pueblo por la mañana, y por la tarde murió mi mujer; y a la mañana siguiente hice como me fue mandado.
19. Y el pueblo me dijo: "¿No nos declararás lo que significan para nosotros estas cosas que estás haciendo?"
20. Entonces les respondí: "La palabra del Señor vino a mí, y me dijo:
21. Habla a la casa de Israel: "Así dice el Señor Dios: 'Voy a profanar Mi santuario, que para ustedes es orgullo de su fuerza, encanto de sus ojos y deleite de su alma. Sus hijos y sus hijas que ustedes han dejado detrás, caerán a espada.
22. Harán como Yo he hecho; no cubrirán sus bigotes ni comerán pan de duelo.
23. Sus turbantes estarán sobre sus cabezas y su calzado en sus pies. No se lamentarán ni llorarán, sino que se pudrirán en sus iniquidades y gemirán unos con otros.