51. Actuó con poder, desbarató las intrigas de los orgullosos.
52. A los poderosos los quitó de sus tronos, y a los humildes los puso en lugares de honor.
53. A los hambrientos llenó de bienes, y a los ricos los envió con las manos vacías.
54. Ayudó al pueblo de Israel, su siervo, y siempre lo trató con misericordia.
55. Cumplió así su promesa a nuestros padres: trató con misericordia a Abraham y a sus descendientes para siempre.
56. María se quedó con Elisabet como tres meses. Después regresó a su casa.
57. Cuando llegó el momento, Elisabet dio a luz a su hijo.
58. Sus vecinos y familiares se llenaron de alegría al enterarse de que el Señor había sido misericordioso.