1. Luego me vino este mensaje del SEÑOR:
2. «Hombre mortal, ¿de qué sirven las viñas del bosque? ¿Tienen tanta utilidad como los árboles? ¿Llegan a tener siquiera el valor de una sola rama?
3. ¡No, pues la madera de las viñas ni siquiera puede ser empleada para hacer estacas para colgar ollas y cacerolas o ganchos para colgar ropa!
4. Sólo sirve para hacer leña, y aún así arde en forma muy pobre.
5. Así, pues, ¡es inútil tanto antes como después de ser echada al fuego!