38. A esto hay que añadir los sábados dedicados al Señor junto con vuestros dones, vuestros votos y todas las ofrendas voluntarias que entreguéis al Señor.
39. El día quince del séptimo mes, cuando hayáis recogido la cosecha, celebraréis fiesta en honor del Señor durante siete días; los días primero y octavo serán de descanso.
40. El primer día tomaréis frutos de los mejores árboles, ramos de palmera, ramas de árboles frondosos y de sauces de las riberas y haréis fiesta durante siete días en presencia del Señor, vuestro Dios.
41. Cada año, en el séptimo mes, celebraréis fiesta en honor del Señor; será esta una norma perpetua para las futuras generaciones.