29. Cierto día, Jacob estaba guisando un potaje, cuando Esaú llegó muy cansado del campo,
30. y le dijo:— ¡Tengo hambre, dame de comer de ese guiso rojo!(Por eso a Esaú también se le conoce como Edom).
31. Jacob respondió:— Sólo si me vendes ahora mismo tus derechos de primogenitura.
32. Esaú dijo:— Estoy que me muero de hambre. ¿Qué me importan a mí los derechos de primogenitura?
33. Jacob insistió:— Júramelo antes.Esaú se lo juró, y de ese modo le vendió a Jacob sus derechos de primogénito.
34. Entonces Jacob sirvió a Esaú pan y el potaje de lentejas. Esaú comió, bebió, se levantó y se fue. Así fue como Esaú malvendió sus derechos de primogénito.