26. El Señor, pues, concedió sabiduría a Salomón, tal como le había prometido. Jirán y Salomón vivieron en paz y firmaron un tratado.
27. Salomón decretó un reclutamiento de trabajo obligatorio por todo Israel: reclutó a treinta mil hombres
28. y los envió al Líbano en turnos de diez mil por mes. Así, pasaban un mes en el Líbano y dos meses en casa. Adonirán estaba al mando del trabajo obligatorio.
29. Salomón tenía, además, setenta mil acarreadores y ochenta mil canteros en la montaña,