26. Y cuando vuestros hijos os pregunten: ‘¿Qué significa esta ceremonia?’,
27. les contestaréis: ‘Este animal se sacrifica en la Pascua, en honor del Señor. Cuando él hirió de muerte a los egipcios, pasó de largo por las casas de los israelitas que vivían en Egipto, y así salvó a nuestras familias.’ ”Entonces los israelitas se inclinaron en actitud de adoración,
28. y luego fueron e hicieron todo tal como el Señor se lo había ordenado a Moisés y Aarón.
29. A la medianoche, el Señor hirió de muerte al primogénito de cada familia egipcia, lo mismo al primogénito del faraón que ocupaba el trono, que al primogénito del que estaba preso en la cárcel, y también a las primeras crías de los animales.
30. El faraón, sus funcionarios y todos los egipcios se levantaron aquella noche, y hubo grandes gritos de dolor en todo Egipto. No quedó una sola casa donde no hubiera algún muerto.
31. Aquella misma noche el faraón mandó llamar a Moisés y Aarón, y les dijo:–Marchaos, apartaos de mi gente, vosotros y los israelitas. Id a adorar al Señor, tal como dijisteis.
32. Llevaos también vuestras ovejas y vacas, como queríais, y marchaos. Y rogad a Dios por mí.
33. Los egipcios apremiaron a los israelitas para que se fueran pronto de su país, pues pensaban que todos iban a morir.
34. Los israelitas sacaron la masa, todavía sin levadura, y con artesa y todo la envolvieron en sus ropas y se la echaron al hombro.
35. Además, siguiendo las órdenes de Moisés, pidieron a los egipcios objetos de oro y plata, y vestidos.
36. El Señor hizo que los egipcios dieran de buena gana todo lo que los israelitas pedían, y así los israelitas despojaron a los egipcios.
37. Los israelitas se dirigieron de Ramsés a Sucot. Sin contar mujeres y niños, eran unos seiscientos mil hombres de a pie, en edad militar.
38. Con ellos se fue muchísima gente de toda clase, además de muchas ovejas y vacas.